El mexicano Efraín Juárez presentó su renuncia como entrenador al club colombiano Atlético Nacional, apenas unas semanas después de que consumara un doblete histórico con los títulos de Copa y Liga que asombraron al futbol de aquel país.
El técnico logró esa hazaña sin haber dirigido nunca a un cuadro de primera división y con sólo cuatro meses al frente del conjunto verdolaga.
Diversos medios locales difundieron la noticia, pero con la aclaración de que la institución buscaba negociar y mantenerlo en el cargo. El club sólo anunció que dicha situación estaba en “desarrollo” y que una vez que estuvieran en condiciones harían público el desenlace.
Por la noche, el ex jugador publicó en su cuenta de la red social X que sus motivos no fueron económicos. “Ojalá hubiera habido una mejor comunicación” y pidió que se contara la verdad sobre su salida del Atlético Nacional.
Juárez recibió demasiadas críticas antes de iniciar su gestión como entrenador, pues recordaban que carecía de experiencia en el banquillo. Sin embargo, lo que consiguió con el club más popular de Colombia dejó sin argumentos a sus detractores.
El menosprecio, la polémica y el éxito pueden definir la trayectoria de Efraín Juárez, quien hizo historia como el primer mexicano en ganar un doblete de títulos en una liga de prestigio en el extranjero tras coronarse ayer con el Atlético Nacional en la Liga de Colombia al vencer 2-0 (global 3-1) al Tolima.
Apenas en su primera experiencia en el banquillo, Juárez enfrentó las críticas y desprecio por llegar como entrenador novato al equipo más popular y ganador de Colombia. No sólo eso: también se vio salpicado en una polémica al ser sancionado por provocar con un festejo desmesurado a la afición del Deportivo Independiente Medellín, el acérrimo rival de los verdolagas, en un duelo considerado de alto riesgo.
A diferencia de otras ocasiones donde los efusivos festejos lo llevaron a la controversia, Juárez parecía ahora estar en shock ante la proeza conseguida del doblete. Minutos antes celebraba con gritos ysaltos los goles de sus jugadores, ya con el título en mano la reacción era incluso de incredulidad.
Soy muy efusivo en el día a día pero estoy muy tranquilo, voy con pies de plomo. Estoy feliz, ahora quiero ir a descansar, fueron cuatro meses de no dormir, de llorar por todo, alegría, frustraciones, injusticias, pero me las comí todas y al final hoy tengo la recompensa. Ojalá lo disfruten porque costó de veras, señaló al ganar el título. De manera inesperada y prematura, encontró la gloria deportiva, primero tras ganar hace ocho días la Copa Colombia y repetir la hazaña este fin de semana con el título de la Liga Dimayor, el número 18 del equipo verdolaga en su historia. Un doblete que sólo había conseguido el Atlético Nacional con el entrenador Juan Carlos Osorio, en 2013.
