El parque estatal Sierra de Guadalupe enfrenta diariamente la presión de la mancha urbana de habitantes originarios de cuatro municipios mexiquenses y una alcaldía de la Ciudad de México los cuales han ocupado más de mil hectáreas del lugar debido a los cambios del uso de suelo.
El Grupo Ambientalista Sierra de Guadalupe A.C recordó que el 10 de agosto de 1976, el gobierno del estado de México decretó la creación del parque estatal que tenía más de 6 mil 322 hectáreas.
Debido a la invasión “hormiga”, a los incendios provocados y a fenómenos naturales en 2013 los linderos fueron ajustados a 5 mil 293 hectáreas por lo que se estableció vigilancia constante para impedir el cambio de uso de suelo, así lo señaló el ambientalista Jorge Martínez.
Más de tres millones de habitantes de Tlalnepantla, Tultitlán, Coacalco y Ecatepec y un millón de la alcaldía Gustavo A. Madero de la CDMX ejercen gran presión sobre la reserva ecológica por la construcción de más fraccionamientos.
Como parte del plan de manejo y conservación del parque estatal, se ha construido un sistema de más de 143 presas filtrantes con el propósito de ’reducir la velocidad de los escurrimientos pluviales, hay presas de gavión, de mampostería y de piedra acomodada que tienen como objetivo retener azolve, ramas, lodos’, explico
Los incendios forestales también se han incluido en las alertas que tiene el parque Sierra de Guadalupe por lo que es urgente que los gobiernos municipales y la administración de la gobernadora Delfina Gómez activen un presupuesto y el fideicomiso establecido para proteger la zona.
Jorge Martínez, mencionó que no se debe perder más tiempo ya que es necesario que entren en operación los recursos etiquetados para atender problemas de la zona montañosa que conforma la Sierra de Guadalupe.
Verdeando es otro grupo ecologista protector de la reserva ecológica que durante 17 años ha impulsado campañas de reforestación, retención de suelo, retiro de plantas invasoras y la creación de 50 bordos filtrantes para atenuar la bajada de aguas pluviales que erosionan los terrenos en Coacalco y Tultitlán.
Cuenta con 100 voluntarios que se coordinan con autoridades de Conservación Ecológica, informó Ángel Escalante Reinoso, representante del equipo de control de incendios, quien hizo un llamado al gobierno del Estado de México, al Ayuntamiento de Coacalco, Tultitlán y Tlalnepantla para impedir la invasión de más casas en el bosque.