Titulares

La FIFA destinará 50 millones de dólares a la OMS, la OMC y ACNUR 

Sede del organismo rector del futbol mundial, el 17 de diciembre de 2015 en Zúrich, Suiza.

La FIFA, en el marco del fondo de legado del Mundial de Qatar 2022, va a destinar 50 millones de dólares (47.5 millones de euros), a repartir entre la OMS, la OMC y ACNUR, con el objetivo de desarrollar programas sociales, anunció la propia Federación Internacional de Futbol. 

Con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la FIFA va a apoyar la iniciativa «Beat the Heat», que lucha por la protección de personas que trabajan en regiones expuestas a un calor extremo y afectadas especialmente por los cambios climáticos. 

Junto a la Organización Mundial del Comercio (OMC), la FIFA apoyará el Fondo de Mujeres Exportadoras en la Economía Digital, un programa destinado a ayudar a mujeres a aprovechar las oportunidades del comercio internacional y de la economía digital gracias a subvenciones y asistencia técnica. 

Finalmente, con ACNUR, la Agencia de la Naciones Unidos para los Refugiados, respaldará a personas desplazadas procedentes de Oriente Medio y del Norte de África. 

Además, el fondo de legado de Qatar 2022 incluye la colaboración entre la Aspire Academy y el Programa de Desarrollo del Talento de la FIFA, que dirige el entrenador francés Arsène Wenger, «con el objetivo de detectar a jóvenes talentos en zonas remotas de un número concreto de países en desarrollo». 

En su informe financiero anual de 2022, la FIFA había anunciado un beneficio bruto ligado al Mundial de Qatar de casi 5 mil 800 millones de dólares (5 mil 500 millones de euros). 

El anuncio de esta ayuda financiera de la FIFA provocó el enfado de Amnistía Internacional. 

«Es vergonzoso que la FIFA y Qatar hayan lanzado su tan esperado fondo de legado sin ningún reconocimiento de su evidente responsabilidad hacia el alto número de trabajadores migrantes que fueron explotados y que, en alto número, murieron para hacer posible el Mundial de 2022», declaró en un comunicado Steve Cockburn, jefe de la sección de derechos laborales y deporte de Amnistía Internacional. 

«Este fondo de legado no puede ser el final de la historia. La FIFA debe hacer de una vez lo correcto y ofrecer reparaciones significativas a todos aquellos cuyos derechos fueron violados y pisoteados por su principal torneo», añadió.