El Gran Premio de Sao Paulo, vigésimo primera fecha del calendario 2024 de la Fórmula 1, a celebrarse este fin de semana en el circuito de Interlagos, acoge un nuevo capítulo del duelo entre Max Verstappen (Red Bull) y Lando Norris (McLaren), que llega caliente tras otra lucha intensa en México en la que el piloto británico dio un mordisco a la ventaja del vigente campeón, que arrancaría con penalización por cambiar el motor.
La batalla volvió a calentarse en el Autódromo Hermanos Rodríguez, en especial por otro cara a cara entre Verstappen y Norris en el comienzo de la carrera que dejó al neerlandés con una penalización de 20 segundos por sacar de la pista de manera ilegal al británico en dos ocasiones.
Pese a esto, ‘Mad Max’ acabó sexto y minimizó el daño lo máximo posible, mientras Norris, quien suma 315 puntos, evitó el doblete de Ferrari y cruzó la meta segundo para dejar el colchón de Verstappen (362) en 47 puntos. Un aventaja que parece suficiente cuando restan solo cuatro carreras, pero la posibilidad de que el actual campeón monte un nuevo motor y penalice abre más que nunca la lucha por el título. Sobre todo, con un Gran Premio con carrera al esprint y más puntos en juego.
Por ello, Norris es consciente de que esta es su gran oportunidad de mantener vivas sus opciones. Debe atacar, ser más agresivo, para generar dudas en un Verstappen con un Red Bull que sigue sin ser el mejor coche de la parrilla. Y ahora el duelo viaja a un circuito de Interlagos que siempre asegura diversión y emociones fuertes, un trazado en el que venció el neerlandés el año pasado, por delante del británico.
El Mundial de Constructores está abierto Interlagos también será otro examen para unos entonados Ferrari, el mejor coche en la actualidad que vive un momento dulce, sobre todo, después de la victoria de un Carlos Sainz intratable en México. Los italianos no celebran un triunfo en este trazado desde 2017, obra del alemán Sebastian Vettel. Pero este parece ser el momento de los italianos, que quieren su triplete particular tras ganar en Austin y en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
McLaren (566) es el actual líder, pero la inconsistencia del australiano Oscar Piastri, fuera del podio en Austin y México, ha hecho que Ferrari (537), la fuerza dominante y que no lo gana desde 2008, crezca, ya superando a Red Bull (512), tercero y ya algo lejos.
Brasil y su carrera al esprint le dan a Interlagos esa condición de crucial. Y, pese al dominio reciente de Verstappen, Mercedes quiere recuperar su lugar, ya que las ‘balas plateadas’ han ganado en seis ocasiones en la última década, con Lewis Hamilton como piloto en activo con más triunfos en Brasil (3). De hecho, el británico tiene muy buen recuerdo, aquí ganó en 2008 su primer Mundial, al quedar quinto y negándole la victoria a Felipe Massa.
Con Mercedes cerrando el ‘top 5’ la carrera en México, Aston Martin sigue sin obtener los resultados esperados y a la espera de mejoras que no llegan, sin puntos después de que Lance Stroll estuviera desaparecido y Fernando Alonso retirando su coche en el GP 400 de su carrera. Ahora llega a un circuito talismán, donde nunca ha ganado pero sí celebró sus dos títulos. Además, el año pasado aseguró el podio ante Sergio Pérez, quedando por delante por milésimas.
Los pilotos se encontrarán un circuito clásico, donde priman las manos del piloto, con la fluidez y la velocidad como objetivos principales, alejándose de los ángulos rectos y frenadas fuertes abundantes en los trazados urbanos o semiurbanos. El piloto cobrará más importancia en un fin de semana en el que se esperan lluvias los tres días del Gran Premio.
