Al menos 55 muertos y 190 heridos dejaron ayer bombardeos israelíes contra varios puntos de la franja de Gaza, en lo que la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados en Palestina (Unrwa) describió como una nueva noche de terror.
Mientras, en el norte de Líbano, 21 personas perdieron la vida en un ataque israelí contra la localidad de Aito, de mayoría cristiana. El ejército de Benjamin Netanyahu además ordenó la evacuación de 25 poblaciones y Hezbollah reportó el lanzamiento de una salva de cohetes que encendieron las sirenas en 182 municipios del noroeste israelí, al tiempo que informó que sus militantes libran violentos combates.
Netanyahu reconoció ayer desde la base militar de Binyamina –donde Hezbollah mató antier a cuatro soldados e hirió a más de 60– que Israel paga un alto precio, pero advirtió que seguirá atacando sin piedad a la organización chiíta apoyada por Irán, Hezbollah, incluso en Beirut. Estamos librando una dura campaña contra el malvado régimen de Teherán, que quiere acabar matándonos, afirmó.
Tras el ataque del domingo, el ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, notificó a Washington que su país dará una fuerte respuesta a Hezbollah, durante una conversación telefónica con su homólogo estadunidense, Lloyd Austin.
Estamos en guerra y un ataque contra una base de entrenamiento en la retaguardia es algo grave y con resultados dolorosos, sostuvo el jefe del ejército de Israel.
En Líbano, Israel amplió sus objetivos contra Hezbollah y mató a 21 personas e hirió a ocho más, en su primer ataque contra la ciudad norteña de mayoría cristiana de Aito, cuando hasta ahora sus operaciones se habían centrado en el sur, el valle del Bekaa y los suburbios de Beirut.
El ataque alcanzó una casa alquilada a familias desplazadas y no está claro cuál fue el objetivo. El número de víctimas podría aumentar a medida que se identifiquen partes de cuerpos localizadas en la zona. Se están realizando pruebas de ADN para determinar la identidad de las partes de cuerpos que han sido retiradas del lugar, informó el ministerio libanés de Salud Pública.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ordenaron la evacuación de 25 localidades libanesas. Las FDI no tienen intención de hacerle daño. Por su seguridad, debe evacuar sus hogares inmediatamente y trasladarse al norte del río Awali, fue el mensaje difundido en árabe, y amenazó que desoír esta orden o estar cerca de miembros de Hezbollah, instalaciones o armamento de esta milicia pone su vida en peligro.
Tel Aviv aseguró haber destruido 200 “objetivos terroristas y eliminado –durante la última jornada– a decenas” de miembros de Hezbollah en bombardeos y combates cuerpo a cuerpo, entre ellos al comandante de la unidad antitanque de la fuerza de élite chiíta, Kamal Naim, a quien atribuyó la autoría de numerosas operaciones terroristas.
En tanto, millones de israelíes tuvieron que refugiarse de los proyectiles lanzados desde Líbano hacia el centro del país. Alrededor de 60 misiles cruzaron a territorio israelí desde la tarde del domingo, los cuales en su mayoría fueron interceptados y no hubo heridos, según las FDI.
Ayer Hezbollah disparó cohetes contra el puerto de Haifa y reivindicó haber impactado una base naval y un cuartel próximo a Netanya.
Médicos sin Fronteras se vio obligada a suspender su trabajo en varias zonas de Líbano debido a los bombardeos.
Nuestros equipos están trabajando para ofrecer asistencia, pero han tenido que suspender las actividades en algunas zonas, indicó la organización. Desde mediados de septiembre, se han registrado 18 ataques contra instalaciones de salud en Líbano, al menos 72 trabajadores hospitalarios han muerto y 40 han resultado heridos, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud.
Por otra parte, una patrulla de tropas italianas de la Fuerza Provisional de Naciones Unidas en Líbano (Finul) localizó una serie de artefactos explosivos a lo largo de la carretera que conduce a su base de operaciones UNP 1-32A. No pudieron desactivar todos los explosivos debido a que uno de ellos estalló y provocó un incendio en la zona.
Netanyahu reiteró ayer el llamamiento para que los cascos azules de la ONU se retiren de zonas cercanas a la frontera libanesa-israelí, petición que una vez más fue rechazada por la organización.
Se ha tomado la decisión de que la Finul permanezca actualmente en todas sus posiciones a pesar de los llamamientos de las FDI para que abandonen las posiciones próximas a la Línea Azul, declaró Jean-Pierre Lacroix, jefe de las fuerzas de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas, pese a las heridas sufridas por cinco de sus miembros. Lacroix volvió a denunciar ataques repetidos y deliberados de Tel Aviv a la base de la Finul.
En el frente palestino, ayer en Cisjordania reocupada las FDI mataron a dos hombres, uno de ellos un joven de 17 años. Las autoridades cisjordaníes reportaron que cerca de 750 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes y de los colonos desde el inicio de la guerra el 7 de octubre de 2023.
En la franja de Gaza se vivió otra noche de horror, en palabras del director de la Unrwa, Philippe Lazzarini, quien describió la situación de infierno interminable.
Ataques israelíes dejaron 25 fallecidos y 120 heridos en una escuela y un hospital, que acogían refugiados; además, hubo ocho muertos y varios heridos en ciudad de Gaza en un bombardeo contra tiendas de campaña de desplazados; en Jabaliya, 12 civiles perdieron la vida en un colegio y campamentos de refugiados, y 10 más perecieron en un punto de distribución de ayuda humanitaria, donde las autoridades denunciaron que un dron abrió fuego de manera indiscriminada contra quienes estaban formados en la fila, en el lugar hubo más de 55 heridos; en Jan Yunis fueron asesinadas 14 personas y muchas resultaron heridas.
Al cierre de esta edición la cadena Al Jazeera reportó una nueva embestida contra el campamento de Nuserait y aún no se tenía el número de muertos y heridos.
Siembran explosivos
La cadena catarí también informó que el ejército israelí plantó explosivos en casas del barrio de Al Faluja del campamento de Jabaliya, mientras continúa el asedio al norte de Gaza, donde 400 mil palestinos se encuentran atrapados.
Un total de 42 mil 289 personas han muerto en Gaza por fuego israelí desde que comenzó el conflicto, mientras las autoridades libanesas confirmaron la muerte de 2 mil 309 personas en su territorio.
