Titulares

Devastadas 2 ciudades al concluir ofensiva israelí

Palestinos regresan a Deir al Balah, después de que el ejército israelí arrasara con sus operaciones en esa zona y en Jan Yunis.

Israel finalizó ayer un mes de operaciones militares en el centro y el sur de la franja de Gaza, en el que afirmó haber matado a más de 250 combatientes palestinos. 

Las tropas de la 98 división han completado su operación divisional en la zona de Jan Yunis y Deir al Balah, tras cerca de un mes de actividad operativa simultánea sobre y debajo de la superficie, señaló un comunicado castrense. 

Las tropas eliminaron a más de 250 terroristas y destruyeron decenas de (unidades de) infraestructura, añadió. Un portavoz militar confirmó a Afp que no se están realizando otras ofensivas en estas áreas de momento. 

Habitantes de Jan Yunis describieron que tras su regreso a la principal ciudad del sur del territorio palestino, gobernado por Hamas desde 2007, encontramos nuestras casas y las de nuestros vecinos destruidas. El cadáver de uno de nuestros vecinos estaba ahí descompuesto, contó Amal al Astal, de 48 años. Palestinos que regresaron a Deir al Balah esta semana describieron escenas similares. 

La guerra en Gaza estalló el 7 de octubre, cuando combatientes de Hamas atacaron el sur de Israel y mataron a mil 199 personas, en su mayoría civiles, según un balance oficial israelí. También tomaron 251 rehenes, de los cuales 105 continúan en Gaza, incluidos 33 que los militares israelíes declararon muertos. En respuesta, el premier Benjamin Netanyahu prometió destruir a Hamas y lanzó una ofensiva que ya dejó 40 mil 602 muertos en Gaza, según el Ministerio de Salud del territorio, que no detalla cuántos son civiles y cuántos combatientes. 

En tanto, el canciller israelí, Israel Katz, aseguró en X que Israel necesita asegurarse de que el deseo de morir de Meshal (el líder de Hamas) y sus amigos en el liderazgo de la organización terrorista se cumpla en un futuro cercano, en referencia a la reciente declaración de Meshal, quien aseguró que Hamas debe volver a la práctica de los atentados suicidas para combatir a las fuerzas de Israel. 

Lo anterior, 10 días después de que en el sur de Tel Aviv tuviera lugar un atentado suicida fallido. 

Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó que la campaña de vacunación contra la poliomielitis arrancará este domingo en la franja, donde Israel ya aceptó una pausa humanitaria de al menos tres días en Gaza para tal efecto. 

Mientras, en Cisjordania reocupada, el tercer día de la operación militar israelí se saldó con tres milicianos abatidos, entre ellos un jefe militar de Hamas, elevando a 19 el número de palestinos asesinados en 72 horas. Israel lanzó el miércoles una ofensiva a gran escala en el norte de Cisjordania con bombardeos e incursiones de convoyes blindados en ciudades como Yenín, Naplusa, Tubas, Tulkarem, y en dos campos de refugiados. 

Tel Aviv informó ayer en un comunicado que mató a un comandante de Hamas en Yenín, al que identificó como Wassem Hazem. 

Según el ejército israelí, Hazem era el jefe de Hamas en Yenín y estaba implicado en la orquestación de tiroteos y atentados con bomba contra israelíes. 

Hazem murió en un vehículo que contenía armas, durante un tiroteo. Otros dos milicianos de Hamas fueron abatidos por un dron cuando intentaban escapar del coche. 

Por su parte, la agrupación armada islamita llamó a la población de Cisjordania a unirse para detener la invasión y el comportamiento criminal de Tel Aviv. 

Las masacres, los crímenes y las violaciones de la ocupación en Cisjordania no socavarán la firmeza de nuestro pueblo, dijo la agrupación en un comunicado. 

Hamas aseguró que Israel tiene un plan para apoderarse de las tierras de Cisjordania y expulsar a la población, en alusión a las declaraciones de Katz, que deslizó recientemente la posibilidad de evacuar temporalmente a los residentes cisjordanos por seguridad. 

Mientras tanto, Israel aprobó la permanencia de sus tropas a lo largo del corredor Filadelfia, fronterizo entre Gaza y Egipto, como condición inapelable para cualquier posible acuerdo de alto el fuego, con un voto en contra, el del ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien considera que esta decisión significa renunciar a los rehenes.