Además de que la presa El Zapotillo, en la región Altos de Jalisco, está al 102 por ciento de su capacidad (lo cual garantiza el abasto de agua para Guadalajara y su área conurbada, el lago de Chapala y las presas Calderón y El Salto), los abastecedores principales de agua para la capital jalisciense y municipios conurbados han tenido una amplia recuperación debido al abundante temporal de lluvias.
Según el gobernador Enrique Alfaro, las lluvias han permitido que el lago de Chapala esté al 42 por ciento de su capacidad y con captación creciente, al igual que ha ocurrido con la presa Calderón, que llegó al 27 por ciento, mientras que la de El Salto está también aumentando su nivel.
Que la presa El Zapotillo esté a la totalidad de su capacidad es una garantía de que esas dos presas tendrán agua durante lo que resta del año y se podrá cumplir con el abasto urbano sin problemas, luego de la larga sequía durante la primera mitad del año.
Aunque en los tres primeros años de su administración el gobernador Alfaro, del partido MC, buscó junto con su homólogo panista de Guanajuato, Sinhué Rodríguez, que parte del caudal de la presa El Zapotillo fuera destinado también para abastecer a la ciudad de León, fue la oposición de los habitantes de los Altos de Jalisco (en especial del pueblo de Temacapulín), la que impidió ese propósito que incluía inundar esa y otras dos comunidades con una cortina más alta que los 80 metros actuales.
Sin embargo, ahora Alfaro se dijo muy contento y afirmó que su gobierno logró garantizar el abasto de agua para Guadalajara sin inundar los tres pueblos amenazados (aunque la inversión de la presa es puramente federal), criticando este domingo a quienes decían que la presa El Zapotillo no podría llenarse, lo cual ocurrió apenas durante la primera parte del actual temporal de lluvias.
Socavón, hasta el diez de agosto
Mientras el temporal llena presas y mejora niveles del lago de Chapala, en la ciudad se continúan presentando socavones debido a las malas condiciones en que se encuentran los sistemas de captación y distribución de agua, además de que la urbanización ha llenado de pavimento zonas que antes eran áreas naturales para captación e infiltración de lluvia al subsuelo, seǵun han informado de manera reiterada expertos e investigadores universitarios.
De visita a la zona del socavón en avenida López Mateos, en Zapopan, Alfaro dijo que será hasta el 10 de agosto cuando esté concluida la reparación de la gran oquedad de 40 metros de largo y 4 de profundidad que ha mantenido un permanente caos vial al sur de la ciudad desde que se hundió el suelo el pasado jueves 25 de julio; es decir, la reparación durará por lo menos una semana más de lo previsto originalmente.
“Los trabajos no son tan sencillos, no pueden ir a la velocidad que quisiéramos como en una temporada mucho más seca, y estimamos que podríamos terminar ya los trabajos completos hacia el 10 de agosto, ese va hacer el final para poder tener todas las pilas ya coladas, las trabes instaladas y la carpeta reconstruida y obviamente el colector también”, dijo.
Explicó que lo ocurrido fue por el colapso de un puente y de un colector con una antigüedad de más de 60 años, aunado a la cantidad de agua de lluvia que ha rebasado los parámetros normales.
