Según datos del INEGI, entre las personas que leen 43.8% son mujeres, mientras que 38.1% hombres, aunque se avanza a paso lento, lo cierto es que los espacios para la publicación de libros escritos mujeres van en aumento, prueba de ello son los cinco títulos que a continuación recomendamos.
Elvira Sastre. Las vulnerabilidades. Seix Barral. 352 pp.
‘Las vulnerabilidades’ es una historia de suspense psicológico que gira en torno a la relación de poder y dependencia que se establece entre dos mujeres heridas y que cuestiona las consecuencias de un acto tan aparentemente altruista como ayudar a los demás.
Chiara Bottici. Mitologías feministas. Malpaso. Trad. Macarena Balagué. 200 pp.
Un viaje a través de los mitos más relevantes de la feminidad que busca ponerlos a prueba a través del prisma de la condición moderna. El mito es un proceso de reelaboración de un núcleo narrativo específico que se expresa a través de la formulación de sus posibles variantes. En este libro la autora explora los flujos de discursos a través de una especie de humorismo metafísico y atraviesa los fantasmas heredados de la “hombrecracia”: riendo con ellos y a través de ellos.
Nuria Ruiz de Viñaspre. Las abuelas ciegas. Arlequín. 125 pp.
La escritora española navega en los límites al establecer un paralelismo o fusión entre lo que “la poesía le hace al lenguaje” y “lo que el Alzheimer le hace al lenguaje”. A través de sus poemas, Ruiz de Viñaspre consigue ahondar aún más en su personal mundo poético, excavar en el lenguaje de las perplejidades.
Allure Spinoza. Las niñas no se tocan. Alas de cuervo. 100 pp.
Novela enmarcada en los géneros de thriller criminal y social. Narra las circunstancias de dos madres y sus hijas que desembocan en crímenes provocados por el contexto y las decisiones tomadas. Marina y Mónica son las madres de Nubia y Natalia. Las primeras tuvieron maternidades problemáticas que motivaron el abuso y abandono hacia sus hijas preadolescentes. Estas últimas buscan el resarcimiento a sus dolencias sin importarles quien sea el depositario de su rencor, lo que las lleva a incurrir en actos criminales
Esther Charabati. Odio a los sanos… y a los optimistas. BonArt. 94 pp.
La vida se desliza, veloz, hasta que el cuerpo pisa el freno y se niega a seguir al mismo ritmo. Cuando el dolor lo coloniza, la voluntad pierde el control. En ese momento se pone en marcha un dispositivo médico, psicológico, familiar y social que acompañan al poseso para librarlo del tormento. ¿Es un drama o más bien una comedia en la que cada uno desempeña un papel? Los relatos de la autora mexicana arrojan algo de luz a la pregunta.
