Christian Horner seguirá siendo el jefe de Red Bull, la actual escudería campeona de la Fórmula 1, tras ser absuelto el miércoles de un presunto caso de mala conducta hacia una empleada.
La compañía austriaca de bebidas energéticas, propietaria del equipo dominador de la especialidad, emitió un comunicado tras una investigación independiente y antes de la carrera inaugural de la temporada, que se disputará el sábado en Barhéin.
«Red Bull puede confirmar que la queja ha sido desestimada», dijo un portavoz de la compañía. «Red Bull confía en que la investigación ha sido justa, rigurosa e imparcial».
Horner, que está casado con la ex cantante de las Spice Girls Geri Halliwell, había negado las acusaciones y continuó al frente del equipo durante la investigación en lo que, según dijo, era la normalidad.
El ex piloto de 50 años tenía previsto volar a Barhéin el miércoles, y el resultado de la investigación disipó una nube que se cernía sobre un equipo que ganó todas menos una carrera el año pasado.
«El informe de la investigación es confidencial y contiene información privada de las partes y de terceros que colaboraron en la investigación, por lo que no haremos más comentarios por respeto a todos los implicados», dijo Red Bull.
«Red Bull seguirá esforzándose por cumplir las normas más estrictas en el lugar de trabajo», concluyó.
Según el comunicado, la denunciante tiene derecho a apelar.