La coliflor, un vegetal crucífero de sabor delicado, pero versátil en la cocina, ha estado ganando popularidad debido a sus diversos beneficios para la salud. Hay una serie de razones por las cuales incluir este vegetal en tu dieta puede ser una elección inteligente y aquí las explicamos.
La coliflor es una excelente fuente de nutrientes esenciales. Está cargada de vitamina C, vitamina K, ácido fólico, y una variedad de antioxidantes. También es baja en calorías y carbohidratos, lo que la convierte en una opción ideal para aquellos que buscan mantener una dieta equilibrada.
“El consumo de este vegetal se recomienda por su alto contenido de fibra, antioxidantes, vitamina C y ácido fólico. Su principal componente es el agua y tiene un aporte calórico muy bajo. Es también una fuente importante de vitamina B6 y vitamina K. Entre los minerales destacan el azufre, potasio, calcio y magnesio”, informó el Gobierno de México.
Además, a esta hortaliza que se puede encontrar en cualquier época del año, se le atribuyen propiedades diuréticas debido a que ayuda a eliminar líquidos retenidos.
¿Qué enfermedades previene la coliflor?
El Poder del Consumidor afirmó que por cada 100 gramos (g) de coliflor, sólo 5 g son de carbohidratos, la cifra es menor a la cantidad que contiene el arroz, la pasta, las papas o las harinas, además de que posee una alta cantidad de fibra.
“Este vegetal es una fuente importante de fibra. La fibra juega un papel destacado en la prevención de la obesidad, genera sensación de saciedad y, por lo tanto, reduce la cantidad de ingesta de alimentos”, agregó.
Según el Gobierno de Canarias, en España, este vegetal previene de muchas maneras las enfermedades del corazón, puede ayudar a bajar los niveles de colesterol en el cuerpo, ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer.
“Una dieta rica en vegetales crucíferos como la coliflor ha sido relacionada con una reducción significativa en el riesgo de cáncer, especialmente el cáncer de próstata, cáncer de mama, cáncer de colon, cáncer de ovario y cáncer de vejiga. Un estudio canadiense descubrió que comer media taza de coliflor al día –de forma regular– reduce el riesgo de cáncer de próstata en un 52%”, agregó.
Así debes elegirla y conservarla
A la hora de adquirir una coliflor, se aconseja elegir los ejemplares que presenten cabezas firmes, sin manchas amarillas y hojas verdes. Una vez en casa, se recomienda colocarla de cabeza, en un recipiente con agua salada y fría durante 15 minutos, esto es para asegurarse que ha eliminado todos los insectos o pesticidas.
Posteriormente, debe conservarse en refrigeración, de preferencia envuelta en una bolsa de plástico perforada.
