En artículos anteriores, ya hemos dado algunas recomendaciones y pautas para comer de forma saludable e ir introduciendo alimentos nuevos como el pescado, frutas y verduras en las comidas familiares. También se ha explicado el método del plato, una herramienta muy útil para aprender a estructurar las dos comidas principales, la comida y la cena. Esta vez haremos hincapié en las raciones de alimentos adecuadas a cada niño.
Una vez ya sabemos cómo preparar comidas equilibradas y saludables, debemos reflexionar sobre las raciones que debemos servir a nuestros hijos. En este sentido, es muy importante tener en cuenta y respetar, en todo momento, la sensación de hambre y saciedad de cada uno, sin forzar a comer.
¿Cómo medir las raciones de alimentos con el método de la mano? De forma general, puede ser de gran utilidad usar como orientación la mano de cada comensal. Esta técnica se conoce como el “método de la mano” y sirve como guía para orientar sobre la ración de cada grupo de alimentos.
A modo de resumen, estas serían las directrices de este método:
Verduras: la ración sería equivalente a la cantidad que cabe en las dos manos juntas en forma de cuenco, ya sean crudas o cocidas.
Hidratos de carbono: formado por cereales y derivados (pasta, arroz, pan, etc.), tubérculos (patata, boniato, etc.), que son alimentos ricos en hidratos de carbono. La ración equivale al espacio que ocupa un puño cerrado en crudo.
Proteína: la ración de carne, pescado, huevo y legumbres debe ser de la medida de la palma de la mano (desde la muñeca hasta los dedos). Además, el grosor del trozo de carne y pescado, por ejemplo, debe ser aproximadamente como el grosor del dedo meñique. En el caso de las legumbres, también puede medirse la ración como el grupo anterior (espacio que ocupa un puño cerrado) ya que también son una fuente importante de hidratos de carbono.
Frutas: la ración equivale a la cantidad que cabe en una mano abierta en forma de cuenco.
Quesos: en este caso, el trozo de queso debe limitarse a la ración equivalente en largada y anchura a los dedos índice y corazón juntos.
Grasas: la ración equivale al primer tramo del dedo índice, es decir, la primera falange de este dedo.
Azúcares: los azúcares de adición no están recomendados a ninguna edad. Debe limitarse su consumo y si se utiliza que sea en muy pequeñas cantidades.
Método de la mano. Otros aspectos a recordar. Aparte de servir como guía para saber el tamaño de las raciones de los grupos de alimentos, el método de la mano refuerza otros aspectos de especial interés. Por un lado, los 5 dedos de la mano recuerdan la importancia de comer las 5 raciones de frutas y verduras al día (las tan conocidas como “5 al día”).
Además, señalan la recomendación de hacer varias comidas al día, en concreto, las 5 comidas del día (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena) sobre todo en los más pequeños de la casa.
Existen otros materiales que pueden orientar a las familias sobre las raciones y proporciones adecuadas para los niños. Más concretamente, en 2016 la Agència de Salut Pública de Catalunya publicó el documento “Acompañar las comidas de los niños”, en el que se presentan consejos tanto para familias como para comedores escolares.
Por último, es importante remarcar que estas herramientas sirven de orientación general y que las necesidades de cada uno deben individualizarse por especialistas en la materia.